El divertido ridículo del hombre al perder su rumbo

La curva de la felicidad, un éxito indiscutible en el Infanta Isabel

Carlos Arévalo

Tras veinte años de representaciones por toda España, La curva de la felicidad, obra escrita por Eduardo Galán y Pedro Gómez continúa cosechando aplausos y carcajadas, ahora sobre las tablas del madrileño teatro Infanta Isabel. Gabino Diego, Antonio Vico, Josu Ormaetxe y Jesús Cisneros, forman el elenco de esta desternillante comedia de enredo que pone en entredicho la fortaleza del sexo masculino.

Quino (Gabino Diego), un pusilánime guionista en horas bajas, es un cincuentón al que acaba de abandonar su mujer. Gordo, viejo y amenazado por la calvicie, se siente derrotado entre las paredes de su casa, donde reina el más absoluto desorden y falta de higiene. Condicionado por su ex, pone a la venta el piso pero su escasa autoestima y su inseguridad, le harán firmar tres documentos de pre-venta con tres personas diferentes, una imprudencia que desencadenará una serie de situaciones y diálogos acertadamente cómicos.


El primer interesado en adquirir su vivienda será Javier (Jesús Cisneros), el transportista que acude a recoger las cajas de su ex, un tipo que se considera «experto en mujeres» pero cuya prepotencia se diluye a medida que habla. El segundo comprador es Fer (Antonio Vico), un psicólogo que viene de parte de la ex de Quino y que empleará todo tipo de artimañas y falsas terapias para hacerle creer que puede cambiar su actitud derrotista cuando en realidad solo persigue su propio interés. Y el tercero es Manu (Josu Ormaetxe), un supuesto amigo de toda la vida que, a pesar de su lamentable estado físico y económico, se autoconvence de ser un triunfador con el sexo femenino. Los cuatro, en plena crisis de los cincuenta... y pico, querrán hacer todo tipo de locuras para recuperar la juventud y la libertad perdida hasta darse cuenta de que solo buscan la estabilidad emocional.


Con todos estos ingredientes, La curva de la felicidad escrita en un tono popular y coloquial y actualizada permanentemente, nos ofrece una comedia pura y eficaz que garantiza la diversión para todos los públicos pues no hay ejercicio más sano que el de reírnos de nosotros mismos. Sus intérpretes, Diego, Vico, Ormaetxe y Cisneros, realizan un magnífico trabajo teatral, dotando a sus personajes de una incuestionable vis cómica y mostrando, además, una total complicidad entre ellos que transmiten al público en todo momento.


A pesar de los tópicos que plantea esta función, los espectadores disfrutan desde el primer minuto de esta disparatada trama pues muchos de los hombres, se verán reflejados en estos personajes y, las mujeres, identificarán en ellos también a sus parejas actuales o anteriores. Y es que hay cosas que no cambian nunca.


La curva de la felicidad se representa de miércoles a domingo en el Teatro Infanta Isabel de Madrid (C/ Barquillo, 24) hasta el 25 de febrero de 2024. Más información y venta de entradas:

https://www.teatroinfantaisabel.es/obra/la-curva-de-la-felicidad/

Calificación personal sobre cinco: 🎭🎭🎭🎭

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