Muerte de un viajante: El drama de un hombre derrotado

Última temporada del clásico de Miller en el Infanta Isabel protagonizado por Imanol Arias

Carlos Arévalo

Tal es el éxito cosechado por esta versión de Natalio Grueso, dirigida por Rubén Szuchmacher y estrenada en 2021, que en cada función cuelgan el cartel de «No hay entradas». Y es que el clásico de Arthur Miller continúa siendo una apuesta segura más de siete décadas después de su publicación. Imanol Arias se mete magistralmente en la piel de Willy Loman, un mediocre vendedor obsesionado con el triunfo que, a sus 63 años y agotado tras una vida trabajando incansablemente, sobrevive encerrado en su mundo de ilusiones, creyéndose sus propias mentiras e intentando convencer de ellas a los demás. Junto a él, brilla un elenco extraordinario formado por Andreas Muñoz, Miguel Uribe, Fran Calvo, Cristina de Inza, Virginia Flores y Carlos Serrano-Clark.

La anodina existencia de este gris viajante de comercio que vive de recuerdos y cuya, ya de por sí, escasa productividad ha caído en picado, esconde una firme crítica social a la hipocresía, a la incomunicación entre padres e hijos o al descarado engaño del llamado «Sueño Americano», en el que reina un inmisericorde capitalismo que presume de máximas como la de que «un hombre solamente vale lo que pueda vender», como llega a decir uno de los personajes de este drama que se torna en tragedia, como ya vaticina el propio título.


En una lección interpretativa que va in crescendo a lo largo de la representación, y donde las elipsis temporales tan difíciles de expresar en el teatro juegan un papel fundamental, Imanol Arias y sus compañeros ofrecen lo mejor de su excelente capacidad actoral, haciendo de este texto desgarrador toda una creación donde la violencia, el engaño y la tensión mantienen al público en vilo en la que será la última temporada que ya toca a su fin.


Muerte de un viajante es una de las obras de teatro más adaptadas y representadas en el mundo. Se estrenó en Broadway en 1949 y ganó el Pulitzer de aquel año. A España llegaría en 1952 protagonizada por Carlos Lemos en el teatro de La Comedia. Después, a lo largo del tiempo, otras grandes figuras de nuestra escena como José Luis López Vázquez o José Sacristán volverían a encarnar al apesadumbrado Loman. También en el 52 se llevó al cine, dirigida por László Benedek, obteniendo el Globo de Oro. En televisión se hicieron distintas adaptaciones en países como Estados Unidos, Reino Unido, Argentina o Alemania y, en España, se emitió en el aclamado Estudio 1 de TVE en 1972, con José María Rodero en el papel principal.


Esta amarga reflexión sobre las maquiavélicas relaciones sociales del ser humano demuestra mantener una asombrosa vigencia en un tiempo actual carente de ética y de valores en el que, desgraciadamente, la falsedad y el afán por conseguir públicamente un deslumbrante status a cualquier precio parece imponerse como algo normal.


Muerte de un viajante puede verse de miércoles a domingo en el Teatro Infanta Isabel de Madrid (c/ Barquillo, 24) hasta el 3 de diciembre de 2023. Más información: https://www.teatroinfantaisabel.es/obra/muerte-de-un-viajante/


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