Un homenaje a la memoria artística de nuestros actores de reparto

Carlos Arévalo presenta su cuarto libro dedicado a veinte cómicos españoles muy populares

El escritor e investigador Carlos Arévalo acaba de publicar un nuevo trabajo literario titulado Aquellos «segundos» de primera (El Cronista Cultural Ediciones, 2024) con el que rinde un tributo personal a varias figuras inolvidables de nuestro cine, televisión y teatro ya desaparecidas. 

Con el subtítulo de «Veinte cómicos del teatro y la pantalla que representaron personaje y oficios populares», se trata de un libro con prólogo del actor Jaime Blanch y originales caricaturas del dibujante Ángel Idígoras -Idígoras & Pachi-, y ha contado con la colaboración de la Asociación del Humorismo Español (ASHUMES). Incluye las semblanzas y abundante material fotográfico de grandes actores y actrices españoles de reparto que, en palabras de su autor: «fueron injustamente denominados secundarios y salvaron multitud de películas mediocres y ensalzaron otras consideradas obras maestras».

Sus rostros, y casi nunca sus nombres, se hicieron populares gracias a innumerables interpretaciones en la pantalla grande y también en la televisión, aunque, Carlos Arévalo asegura que: «en la mayoría de los casos, existía una encomiable labor previa en el teatro, donde su protagonismo fue indiscutible y donde dejaron su impronta en la memoria colectiva entreteniendo al público durante décadas».

Los nombres elegidos por el autor, cumplen principalmente el requisito de haber encarnado a personajes o «tipos» que desempeñaban oficios populares y muy humanos, algunos ya desaparecidos, como serenos, porteras, cocineras, alguaciles, limpiabotas, mayordomos, etcétera. Rafaela Aparicio, Laly Soldevila, Xan das Bolas, Antonio Riquelme o José Orjas son algunos de los cómicos que se incluyen en este nuevo volumen que acaba de salir a la venta en librerías especializadas y en http://www.elcronistacultural.com/

Tras publicar las biografías de ilustres artistas españoles como José Bódalo, Antonio Garisa o Jorge Sepúlveda, Carlos Arévalo presenta su cuarto trabajo como un homenaje necesario que rescata una acertada selección de magníficos intérpretes que el tiempo y la desmemoria han condenado ingrata y tristemente al olvido.

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